El otro día volvía ver por sabe Dios que número de vez el amable y entretenido filme de Richard Curtis LOVE ACTUALLY volví a disfrutar con el gran actor Bill Nighy interpretando a una caduca estrella del rock and roll , Billy Mack.

Pero las palabras no se van a centrar en la época de éxitos y fama más bien como el personaje de ficción a sus momentos de olvido . Siempre me han emocionado los viejos COMEBACKS y en el caso de BILLY FURY es especialmente entrañable y loable
En 1966 BILLY FURY tras una década lanzando magnificos singles cual Ricky Nelson inglés, aunque su aspecto físico recordaba a un macarra Elvis, se retira del mundo musical para dedicarse a la ORNITOLOGÍA y a componer canciones ( que no verán la luz hasta ... no adelanto acontecimientos) Poco tiempo duró esa idilica situación ya que problemas de depresión y el alcoholismo hacen mella en la salud del cantante que empieza a tener además problemas cardiacos. Un primer momento de regreso tiene lugar de la mano de Ringo Starr y David Essex para el gran filme músical THAT'LL BE THE DAY en 1973 ( nada que ver con Buddy Holly y si a los primerizos Beatles) sin embargo el verdadero intento por regresar a lo grande se centra en los primeros años 80 , cuando su figura empieza a ser reivindicada por los cachorros del pub rock.